El Maratón es una de las pruebas mas duras entre las carreras populares... para mí, cualquier persona que haya sido capaz de cruzar la meta de un maratón es digna de gran admiración.
Cruzar esa meta significa haber sufrido muchísimas sesiones de entrenamiento, con viento, lluvia, nieve, frío, cansancio, dolores musculares... muchos kilómetros recorridos y sobretodo una gran fuerza de voluntad y mucha constancia.
Llevo muchos años pensando en correr un maratón, pero nunca me he encontrado con la forma física necesaria y las ganas de abordar un entrenamiento tan duro y constante.
Pero este año ha llegado mi momento, me siento motivado, me siento con fuerzas y por primera vez en muchos años me siento capaz.
Cruzar esa meta significa haber sufrido muchísimas sesiones de entrenamiento, con viento, lluvia, nieve, frío, cansancio, dolores musculares... muchos kilómetros recorridos y sobretodo una gran fuerza de voluntad y mucha constancia.
Llevo muchos años pensando en correr un maratón, pero nunca me he encontrado con la forma física necesaria y las ganas de abordar un entrenamiento tan duro y constante.
Pero este año ha llegado mi momento, me siento motivado, me siento con fuerzas y por primera vez en muchos años me siento capaz.
Eso si, creo que solo lo haré una vez en la vida, porque no se que consecuencias me podrá acarrear una hazaña tan sacrificada, teniendo en cuenta que tengo problemas con mis rodillas; condromalacia y subluxación de ambas rótulas, lo que me obliga a correr con rodilleras.
Este problema me tuvo retirado un año y medio de las carreras, pero el año pasado me propuse perder peso y rehabilitar la musculatura de las piernas para que no sufrieran mis rodillas.
En estos momentos me encuentro muy animado y con muchas ganas de probarlo.
Mi principal motivación para correr este año, en concreto el Maratón de Madrid, es porque mi padre corrió una de las primeras ediciones y toda la vida le recuerdo hablando de su gran proeza.
La primera vez, hace unos años, que me propuse correrlo, mi hermana pequeña dijo que me acompañaba, y resultó que yo no tuve la constancia para entrenar hasta el final y mi hermana que es muy cabezona y una gran atleta, entrenó muy duro durante un año y consiguió cruzar la meta.
Imaginaos la caña que me han dado con este tema, así que hasta que no corra un maratón no dormiré tranquilo.
Estoy deseando saber que se siente en los últimos 100 metros de un Maratón, cuando estas viendo el arco de meta y empiezas a saborear un gran triunfo imposible de olvidar en toda tu vida.
Imaginaos la caña que me han dado con este tema, así que hasta que no corra un maratón no dormiré tranquilo.
Estoy deseando saber que se siente en los últimos 100 metros de un Maratón, cuando estas viendo el arco de meta y empiezas a saborear un gran triunfo imposible de olvidar en toda tu vida.